Qué es una Persona – Quién es y Cómo está constituida

Un ingeniero mecánico que trabaja con máquinas entiende perfectamente qué es una máquina. ¿Un gerente que trabaja con personas entiende qué es una persona? Por si acaso no lo tenga tan claro, en las siguientes líneas ensayamos una respuesta1.

 

Qué es una persona – Quién es y Cómo está constituida

Una persona es un animal racional con voluntad que tiene el don de amar, ser libre, conocerse a sí mismo y co-existir.

El carácter animal viene dado por la naturaleza humana, el nivel corpóreo – cuerpo y psiquis – de la persona.

  • En el cuerpo son singulares la cara por su expresividad y las manos por su destreza (al punto que las manos se convierten en la herramienta de las herramientas). A este nivel, cada persona tiene huellas dactilares y ADN únicos
  • Nótese que la persona es desde el punto de vista corpóreo, el animal más vulnerable al momento de nacer, y sin embargo llega luego a ser el “dominador” de la naturaleza.
  • En este nivel corpóreo están los sentidos externos como el olfato, gusto, tacto, oído y vista; y, los sentidos internos que permiten la memoria, la imaginación y la estimación.
  • Es también el nivel de los apetitos sensibles o instintivos. El concupiscible, que hace que luchemos por tener aquello que no tenemos y queremos (ie: aceptación social), y el irascible, que hace que luchemos porque no nos quiten aquello que tenemos y que queremos seguir teniendo (ie: instinto de supervivencia).
  • La naturaleza corpórea cumple funciones vegetativas como la nutrición, reproducción y desarrollo, y funciones locomotrices relacionadas con el movimiento, el comportamiento y la conducta.
  • Uno nace con unas características corpóreas únicas, en parte heredadas, y las va desarrollando y configurando conforme las experiencias y vivencias que uno tiene a lo largo de su vida. Llegado un momento de la vida, el nivel corpóreo comienza a decaer hasta que finalmente muere.

La Persona

la persona

La racionalidad (inteligencia) y la voluntad constituyen el intelecto – nivel incorpóreo – de la persona.

  • La inteligencia es la capacidad de elegir la verdad. La voluntad es la capacidad de elegir el bien.
  • La inteligencia se desarrolla en la razón teórica y en la razón práctica. La inteligencia se desarrolla en hábitos.
  • La voluntad se desarrolla en las virtudes. Ejemplo de virtudes son la prudencia, fortaleza, justicia, templanza, así como pueden ser la integridad, el trabajo en equipo y otras.
  • La articulación entre inteligencia y voluntad se hace por la sindéresis.
  • Uno nace con niveles de inteligencia y voluntad prácticamente en cero y las va desarrollando a lo largo de toda su vida.

Ambos niveles corpóreo e incorpóreo constituyen la personalidad, la esencia o el modo de ser de la persona, pero no la persona en su totalidad. La persona es algo más, constituido por un quién o acto de ser o ser personal, descrito o diferenciado por cuatro dones – radicales o trascendentales personales – amar, ser libre, conocerse a sí mismo y co-existir.

  • Amar es dar, darse, entregarse a los demás. Esto comienza por el respeto, por entender y aceptar al otro.
  • Ser libre es poder elegir. Se puede elegir bien o mal, la verdad o la falsedad, el bien o el mal. Cuando se elige se aprende. Se pueden tener aprendizajes positivos y negativos.
  • Conocerse a sí mismo es conocer lo más profundo, conocer su intimidad. Quién soy. Qué realmente busco. Cuál es mi misión.
  • Co-existir es existir con los demás y especialmente con Dios. La persona es apertura a los demás, al mundo y a Dios. No puede subsistir al margen de ellos.

Esta persona es única, irrepetible e irreductible.

 

 

Lima, Enero del 2016.

 

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(1) Mi agradecimiento a M. Alcázar, J.F. Sellés y G. Castillo por sus enseñanzas y aportes.

Como mirar la historia y discutir con los amigos

Muchas veces comenzamos una conversacion sobre una figura importante (ie: un ex-Presidente) o un hecho relevante (ie: el 5 de abril) y terminamos discutiendo apasionadamente, cuando no enfrentados y fastidiados. Lo sorprendente es q esto sucede a menudo entre personas inteligentes, bien intencionadas, informadas y honorables. Frente a esto hace un tiempo que me hago las siguientes pgtas y q se las hago a Uds:
1. Valdria la pena convertir estas conversaciones/discusiones en algo mas productivo?
2. Que hacemos mal?
3. Que beneficios se pueden obtener si logramos avanzar en este aspecto de nuestro desarrollo humano?

Veamos algunas reflexiones:

1. Valdria la pena convertir estas conversaciones/discusiones en algo mas productivo?
Si, pues nos enriqueceria, ampliaria nuestro entendimiento y, ademas, nos produciria mas placer. Es cierto q hay un cierto pacer en “derrotar” al oponente con nuestros argumentos pero las mas de las veces nos encontramos en un “nadie gana” q masa q empate es un “todos pierden” por el malestar generado y hasta cierto punto sentido de ridículo q queda flotando. Esto desde el punto de vista individual. Desde el punto de vista grupal o social, nos permitiria conseguir un mayor entendimiento y conseguir consensos.

2. Que hacemos mal?
Dos errores frecuentes. El primero es olvidar el contexto. Esto nos hace ser innecesariamente severos en muchos casos pero tambien ocurre lo inverso en otros, en q circunstancias de entorno muy favorables no son tomadas en cuenta. El segundo es q cuando discutimos sobre personas o echos, comúnmente buscamos heroes o culpables, en lugar de buscar lecciones o conclusiones.

3. Que beneficios se pueden obtener si logramos avanzar en este aspecto de nuestro desarrollo humano?
Ademas de los logicos beneficios personales q se desprenden de las reflexiones al punto (1), creo q el enfoque propuesto puede ayudar a un mejor entendimiento politico en nuestra sociedad pues permitira ir mas a lo sustantivo, acercandonos a la verdad con el apoyo de todas las personas a las q les reconozcamos valor.